El permiso de conducir es sinónimo de independencia y autonomía. Nos brinda la extraordinaria capacidad de desplazarnos adonde queramos, cuando queramos. Representa libertad en estado puro, especialmente tras la jubilación, cuando se dispone de más tiempo libre para viajar. Sin embargo, nuestro cuerpo y mente también envejecen. Con los años pueden aparecer limitaciones físicas o cognitivas que acaben afectando peligrosamente nuestra forma de conducir. Por esta razón, la Dirección General de Tráfico (DGT) solicita a los conductores mayores de 65 años una serie de pruebas que, en caso de no superarlas, podrían costarte el carnet. A continuación te contaremos qué trámites debes realizar a partir de los 65 años para que la DGT no te quite la posibilidad de desplazarte en coche por tu propia cuenta.
2Personas mayores: grupo de alto riesgo en accidentes de tráfico
Los datos de la DGT hablan por sí solos. En 2022 los mayores de 65 años representaron el 39% del total de fallecidos en accidentes de tráfico en zonas urbanas. Un porcentaje escalofriante que confirma su condición de población de alto riesgo vial. Si analizamos el global de siniestros en vías interurbanas, casi 300 de los 1270 fallecidos el pasado año superaban los 65 años. Es decir, prácticamente uno de cada cuatro conductores accidentados con resultado mortal pertenecía a la tercera edad. La ciencia respalda que esta elevada accidentalidad se debe en parte a que la edad deteriora aptitudes necesarias para conducir de forma segura como la visión, el oído, los reflejos o los tiempos de reacción y procesamiento de estímulos visuales y sonoros. Todo ello repercute muy negativamente en la capacidad de controlar adecuadamente un vehículo.