La inspección técnica de vehículos (ITV) ha sido durante décadas obligatoria en nuestro país para cualquier turismo, con el fin de garantizar unas condiciones mínimas de seguridad y protección del medioambiente. Sin embargo, a partir de este año se ha aprobado una reforma que exime de pasar la ITV a los coches matriculados antes de 1950, es decir, con una antigüedad superior a los 70 años. Esta medida beneficia especialmente a los propietarios y coleccionistas de vehículos clásicos, que a menudo tenían dificultades para cumplir con ciertos requisitos técnicos debido a las características propias de estos coches históricos. En este artículo analizaremos los detalles de esta nueva normativa, las razones que han llevado al Gobierno a aprobarla y cómo puede impactar tanto en el parque automovilístico español como en el mercado de los vehículos de época. ¿Supondrá el final definitivo de la ITV tal y como la conocemos?
2Exención para fomentar la conservación de vehículos antiguos
La reforma del reglamento de ITV aprobada en 2023 incluye esta dispensa para turismos y ciclomotores fabricados antes de mediados del siglo XX. El objetivo es contribuir a la conservación de estas joyas sobre ruedas como parte del patrimonio cultural español y evitar que sus propietarios se deshagan de ellos para no tener que estar pasando costosas inspecciones periódicas. No obstante, esta excepción solo se aplica a aquellos que hayan sido restaurados de forma precisa y con materiales de época. No vale hacer mejoras con componentes modernos que modifiquen su estado original. Además, esta dispensa no exime de contratar un seguro obligatorio para estos coches vintage ni tampoco garantiza una circulación sin restricciones.