Todos los días, la Tierra gira sobre su eje a una velocidad de aproximadamente 1.674,4 km/h. Esto significa que completa una rotación en 23 horas, 56 minutos y 4 segundos, lo que equivale a un día solar medio. Sin embargo, esta velocidad no es constante, sino que varía ligeramente debido a la influencia de la gravedad de la Luna y el Sol.
Esto produce que la duración del día en la Tierra no es constante, sino que varía según la velocidad de rotación del planeta sobre su propio eje. Esta velocidad, a su vez, depende de varios factores, como la interacción gravitatoria con la Luna y el Sol, la distribución de las masas continentales y oceánicas, y los cambios climáticos y geológicos.
7¿Qué podemos hacer?
No hay mucho que podamos hacer para detener el cambio de la duración del día. Es un fenómeno natural que ha estado ocurriendo durante miles de millones de años. Sin embargo, podemos tomar medidas para mitigar los impactos potenciales de este cambio.
Por ejemplo, podemos desarrollar modelos climáticos que tengan en cuenta el cambio de la duración del día. También podemos desarrollar planes de adaptación para ayudar a las comunidades a adaptarse a los cambios en los patrones climáticos y oceánicos.
