La transformación del estadio Santiago Bernabéu del Real Madrid ha sido uno de los proyectos de mayor envergadura que se han asumido desde que Florentino Pérez asumió la presidencia del equipo por primera vez en el año 2000. El esfuerzo no es solo para tener uno de los estadios deportivos más imponentes del mundo, sino que también se trata de una nueva fuente de ingresos para el equipo, que puede servir para las fechas en las que no se usa el estadio para el equipo mayor, sobre todo en verano.
Pero incluso antes de que terminen del todo las obras, los anuncios ya han convertido al nuevo Bernabéu en uno de los iconos musicales de la ciudad, y han servido para arrebatar a Barcelona, hasta ahora el hogar de este tipo de eventos, varios conciertos clave. Solo en 2024 Taylor Swift, Aitana, el argentino Duki, Karol G o Luis Miguel, todos eventos que hasta hace poco hubiesen preferido apuntar a la ciudad condal o, en su defecto, al estadio Metropolitano a las afueras de la ciudad.
«Estos últimos años han sido muy difíciles para todos, como consecuencia de la pandemia. Hemos ido atravesando circunstancias muy complicadas para los clubes y para los medios de comunicación, al igual que para todos los sectores de la sociedad», explicó Pérez en declaraciones publicadas por el club con motivo de la comida de Navidad con los medios en el palco de honor del Santiago Bernabéu.
Es cierto que la construcción y sus permisos han enfrentado controversias, pero la realidad es que en una ciudad con poco espacio para conciertos masivos, y que sigue necesitando de uno para los eventos de medio tamaño, por lo que la apuesta de Florentino Pérez es una buena noticia para la ciudad. Al menos así lo ve su alcalde, José Luis Martínez-Almeida.
«Nos falta un icono físico que nos identifique, y posiblemente el papel de identificación de icono físico lo cumpla», ha manifestado el regidor en una entrevista en Cope, recogida por Europa Press, donde se ha mostrado «muy contento» por esa obra que contribuirá a que «el nuevo Bernabéu sea capital».
El estadio Santiago Bernabéu prosigue con sus obras de cara al verano. Una vez terminado, el estadio del Real Madrid será un centro multiusos en el que se pretende que se jueguen desde partidos de fútbol, hasta conciertos, encuentros de NBA, espectáculos, tenis, fútbol americano. Es necesario para recuperar el costo de la remodelación que supera los mil millones de euros.
UNA NUEVA REALIDAD PARA LOS GRANDES ESTADIOS
También es cierto que el Santiago Bernabéu no es el único estadio del mundo que ha hecho un esfuerzo claro para transformarse en un espacio multiusos. Casos como el estadio del Tottenham, el del propio Atlético de Madrid o el próximo estadio de Barcelona. Es una decisión que viene dada no solo de la oportunidad de negocio, sino también de la necesidad de cubrir los cada vez mayores costos de mantener una de estas estructuras, y las cada vez mayores exigencias de los asistentes, tanto de los partidos de fútbol como de los demás eventos que se realicen en ellos.
Es una realidad que ya han descubierto los equipos deportivos de Estados Unidos, que desde hace décadas han invertido en mejorar sus campos de juego pensando no solo en los partidos, sino incluso en la acústica o en otro tipo de actividades que realizar.
FLORENTINO CELEBRA EL NUEVO BERNABÉU
Mientras tanto, Florentino Pérez sigue presumiendo del nuevo Bernabéu como una de las joyas de la corona de su carrera en la presidencia. Así lo hizo saber hablando en la cena de Navidad del equipo, donde además se extendió en su tono de celebración.
«Este estadio, que fue producto de un visionario como nuestro querido presidente Santiago Bernabéu, nos va a permitir seguir aspirando a ser líderes en lo deportivo, en lo económico y en lo social», auguró.
«Estamos ya muy cerca de cumplir el sueño de todos los madridistas, que nos va a ayudar a seguir manteniendo la estabilidad institucional y la solidez económica, tan necesarias para seguir siendo competitivos en un escenario deportivo cada vez más difícil y complejo», comentó sobre la evolución del recinto madridista.