Faltan pocos días para escuchar las Campanadas de Nochevieja desde la famosa Puerta del Sol en Madrid y, ahora que la cuenta es regresiva, es momento de fijarnos hasta en los más mínimos detalles, algunos de los que, seguramente, habrás notado y que han llamado tu atención.
Siendo el reloj de la Puerta del Sol, el protagonista para llevar la cuenta regresiva de cada segundo transcurrido antes de la llegada del Año Nuevo, ¿Has notado la numeración que lleva? ¿Te has preguntado por qué razón el cuatro se encuentra reflejado como IIII en lugar de IV? Ya es hora de aclarar tu duda.
4¿Por qué un IIII en lugar del más común IV?
Son varias las teorías que rondan alrededor del raro número 4 del reloj de la Puerta del Sol. Una teoría es que el uso de IIII se remonta a la numeración etrusca, que era la base de la numeración romana. En la numeración etrusca, el número 4 se escribía como IIII. Cuando los romanos adoptaron la numeración etrusca, mantuvieron la forma IIII para el número 4 solo por un tiempo.
Otra teoría es que el uso de IIII se debe a motivos estéticos. La disposición de los cuatro caracteres IIII crea una simetría armónica con el VIII, que está situado en el lado opuesto de la esfera del reloj. Una tercera teoría es que el uso de IIII se debe a motivos prácticos. Cuando los relojes se hacían con moldes que se pegaban a la esfera, era más fácil hacer cuatro caracteres IIII que dos caracteres IV. Esto se debe a que los caracteres IIII se podían hacer con un solo corte en el molde, mientras que los caracteres IV requerían dos cortes.
En el caso del reloj de la Puerta del Sol, se cree que la razón principal por la que tiene el cuatro como IIII es por motivos estéticos. El reloj fue diseñado por el arquitecto José Luis Sánchez Torija, quien quería crear una esfera con un aspecto simétrico y armonioso. Pero, independientemente de la razón, el uso de IIII para el número 4 es una práctica común en muchos relojes, tanto antiguos como modernos.