Las multas más raras de la DGT que te pueden poner sin que te des cuenta

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La Dirección General de Tráfico (DGT) vela por la seguridad vial y para ello establece normas que todos los conductores debemos cumplir. Las sanciones más conocidas son por exceso de velocidad, uso del móvil o conducir bajo los efectos del alcohol. Sin embargo, la ley recoge otros comportamientos al volante igualmente peligrosos y que pueden acarrear multas de hasta 500 euros. En este artículo repasaremos algunas de las infracciones menos conocidas, pero que conviene tener muy presentes para evitar un buen disgusto (y un gasto) cuando llegue la notificación de la DGT a nuestro domicilio.

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Poner música muy alta o usar el claxon sin motivo

Poner música muy alta o usar el claxon sin motivo

Molestar a los vecinos o viandantes con música muy alta o utilizar el claxon de forma injustificada tiene también su correspondiente sanción: entre 80 y 100 euros si es en vías urbanas, y hasta 300 euros en las proximidades de infraestructuras sanitarias. La contaminación acústica y las molestias son las razones esgrimidas por la DGT para establecer estas multas. Por otro lado, estacionar de forma antirreglamentaria o que dificulte la circulación se multa con hasta 200 euros. Dejar el vehículo en una curva sin visibilidad, subido a la acera, obstruyendo el paso o impidiendo la maniobra de salida a otros vehículos se consideran infracciones graves. La DGT argumenta que dificultan la fluidez del tráfico y aumentan el riesgo de atropellos o colisiones.