Calentar un hogar de forma óptima sin disparar la factura es todo un reto. Existen múltiples alternativas en el mercado, pero no todas consiguen maximizar el ahorro energético. Atendiendo a este criterio, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) recomienda tres tecnologías por encima del resto. Tras analizar en detalle distintas soluciones, la OCU concluye que las bombas de calor, las estufas de biomasa y las calderas de condensación de gas natural son los sistemas que mejor equilibran eficiencia, inversión inicial y gasto anual. En este artículo repasaremos qué ofrecen y en qué se diferencian estas tres opciones mejor valoradas, la elección ideal para climatizar la vivienda gastando lo mínimo posible.
6Rendimiento: todas por encima del 100%, bombas de calor insuperables
Comparando la producción de energía térmica útil (calor que climatiza la vivienda) respecto al consumo eléctrico o de combustible, las tres opciones destacadas por la OCU mejoran holgadamente el 100% teórico de rendimiento. Es decir, generan más kilovatios de calefacción efectiva que kilovatios de energía gastada en su funcionamiento. Y son precisamente las bombas de calor las que llevan esta relación al extremo, con registros del 300-400% gracias a su avanzada tecnología. También las calderas de condensación se acercan a ese límite máximo teórico del 110%. Y las modestas estufas de biomasa igualmente son capaces de entregar 103 kWh térmicos por cada 100 kWh del poder calorífico de los pellets consumidos.