Durante décadas, cuando una pareja heterosexual tenía un hijo, se entendía que el bebé era responsabilidad casi exclusiva de la madre, al menos en los primeros meses. Ellas eran las que pedían la baja por maternidad, la reducción de jornada o incluso las que en muchos casos renunciaban a su trabajo para poder dedicarse al cuidado del pequeño. Los padres, por su parte, se limitaban a unos pocos días de permiso retribuido sin posibilidad de implicarse demasiado en la crianza. Pero afortunadamente, esta situación está cambiando en los últimos años para avanzar hacia una mayor corresponsabilidad entre progenitores. En este artículo te contaremos cuanto tiempo dura y qué requisitos se necesitan cumplir para cobrar la prestación por nacimiento y cuidado del menor.
3El permiso ahora tiene una duración de 16 semanas para cada uno de los progenitores
Uno de los principales cambios que introduce este Real Decreto-ley es la ampliación de la prestación por nacimiento, tanto para madres biológicas como para el otro progenitor, que normalmente suele ser el padre. Así, se establece una duración de 16 semanas para cada uno de ellos. Eso sí, hay diferencias en los periodos obligatorios. Para la madre serán forzosas las 6 primeras semanas justo después del parto, que deberá disfrutar una jornada completa para asegurar su recuperación. Mientras, el progenitor no gestante tendrá solo obligatorias las 6 primeras semanas también, pero no necesariamente deberán disfrutarse de forma inmediata tras el nacimiento. Podrá distribuirlas dentro del año posterior al nacimiento del bebé. El resto del permiso, hasta completar las 16 semanas, se podrá coger en periodos semanales completos de forma acumulada o interrumpida según prefiera cada progenitor y siempre que haya un acuerdo previo con la empresa.