El descuido, una peculiaridad humana, se manifiesta en diversos aspectos de nuestra vida cotidiana. Desde olvidar las llaves al salir de casa hasta desatender a los profesores en clase, estos lapsos de atención son comunes. Sin embargo, cuando el dinero y la familia entran en juego, la situación cambia drásticamente. Las cuentas bancarias, esas custodias de nuestros recursos financieros, están sujetas a un fenómeno peculiar: el abandono. La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha delineado un método para evitar la pérdida de fondos en cuentas «abandonadas».
7La Dirección General del Patrimonio del Estado: Órgano de Dictamen
A pesar de las medidas preventivas, la Dirección General del Patrimonio del Estado es el órgano encargado de dictaminar si un saldo está en presunción de abandono. En casos de desacuerdo con la declaración, los usuarios pueden presentar reclamaciones al Ministerio de Hacienda y Función Pública.