El descuido, una peculiaridad humana, se manifiesta en diversos aspectos de nuestra vida cotidiana. Desde olvidar las llaves al salir de casa hasta desatender a los profesores en clase, estos lapsos de atención son comunes. Sin embargo, cuando el dinero y la familia entran en juego, la situación cambia drásticamente. Las cuentas bancarias, esas custodias de nuestros recursos financieros, están sujetas a un fenómeno peculiar: el abandono. La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha delineado un método para evitar la pérdida de fondos en cuentas «abandonadas».
5La Entidad Financiera y su Responsabilidad
Las entidades financieras también juegan un papel vital en la prevención del abandono de cuentas. Brindar información clara sobre los riesgos asociados con la inactividad y promover la participación activa del usuario son estrategias eficaces. Además, la educación continua sobre los servicios financieros disponibles y la importancia de la actualización de datos contribuyen a la conciencia del usuario.