En el corazón de España, la provincia de Guadalajara se alza como un destino que brinda una experiencia única para aquellos que buscan escapar del bullicio de la vida cotidiana y sumergirse en la serenidad de la naturaleza. Entre sus numerosos encantos, destacan los famosos «Pueblos Negros», que deben su nombre a la peculiar arquitectura de sus casas, construidas con piedra pizarra, que confiere a las localidades un aspecto inconfundible.
Hoy nos adentraremos en uno de estos tesoros de la provincia que forma parte de la ruta de los pueblos negros: un lugar donde la paz y el silencio son la norma, y la tranquilidad se convierte en un estilo de vida.
1Majaelrayo. Recorriendo los pueblos negros de Guadalajara
Majaelrayo, un tesoro escondido en la Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha, se encuentra anidado en las majestuosas colinas de la Sierra Norte. Este pequeño rincón, hogar de solo 54 habitantes según el último censo del INE en 2022, es un oasis de tranquilidad en medio de un mundo frenético.
Sus paisajes idílicos y su atmósfera serena lo convierten en un destino verdaderamente especial para quienes buscan alejarse del ajetreo y el bullicio de la vida moderna. Rodeado por la belleza natural, Majaelrayo se erige como un punto de referencia dentro de la ruta de los pueblos negros, ofreciendo a los visitantes la oportunidad de sumergirse en la riqueza histórica y cultural de la zona, mientras disfrutan de un entorno natural espectacular.
