El otoño llega, es momento del bizcocho de castañas, con su característica paleta de colores cálidos, el crujir de las hojas bajo nuestros pies y el aroma inconfundible de las castañas asadas. Esta estación nos regala no solo una naturaleza embellecida, sino también un sinfín de delicias culinarias que nos reconfortan en las frescas tardes de otoño. Entre todas ellas, destaca el bizcocho de castañas, un postre tradicional que nos transporta a los entrañables Magostos, celebraciones populares en diversas regiones de España y otros países de Europa.
9La combinación de los ingredientes del bizcocho de castañas
En un bol, combinamos la harina de castañas, el azúcar y la leche reservada anteriormente. Batimos enérgicamente hasta obtener una crema ligera. Si en lugar de harina de castañas utilizamos puré de castañas, el proceso será similar, pero omitiendo la harina. En otro recipiente, tamizamos la harina de trigo y la levadura en polvo. Añadimos también el bicarbonato y la sal, mezclando todo con el puré obtenido anteriormente. A continuación, incorporamos los huevos uno a uno, asegurándonos de que se integren completamente en la mezcla.
Aparte, combinamos la mantequilla y el licor de café hasta obtener una textura cremosa y casi líquida. Añadimos esta mezcla al bol con el resto de ingredientes, asegurándonos de que todo esté bien incorporado. Vertemos la mezcla en el molde previamente preparado y agregamos los trocitos de castañas hervidas que habíamos reservado junto con la leche restante. Es importante que las castañas estén blanditas para evitar que queden duras como piedras al hornearse y nos quede un excelente el bizcocho de castañas.
