Ya hace unos años que los 40 Music Awards ocupan en España el espacio que en un momento ocuparon globalmente los premios de la MTV. La mezcla entre ceremonia de premios y mini festival es uno de los eventos clave de la industria musical española. La íedición de 2023 no fue diferente, durante casi 4 horas la tarima del Wizink Center recibió a algunos de los artistas más importantes del país, aunque algunas ausencias demostraron que han perdido algo de su poder de convocatoria.
De todas la más evidente, por el intento de ocultarla: la de Shakira. La colombiana, que recibió el Golden Music Award por su indiscutible trayectoria, dio su discurso y su presentación desde Miami, alejada del territorio ibérico por compromisos profesionales y personajes, aunque entre la audiencia no faltó algún chascarrillo sobre su deuda con hacienda. Pero aun en la distancia es una buena noticia escucharla en su versión más íntima interpretando su tema ‘Acrostico’, un tema que recuerda a la época de ‘Antología’ y ‘Donde están los ladrones’.
Pero aunque la colombiana no hizo acto de presencia los 40 Music Awards aún pueden presumir de algunos artistas clave del idioma español. Feid, Emilia, Ana Mena, Manuel Turizo o María Becerra. Pero como últimamente incluso más que los ganadores de los premios principales, en este caso encabezados por una Ana Mena que se fue del Wizink con el premio de artista del año, lo más importante de la gala es quien da la mejor presentación, y allí la competencia es complicada de medir.
Por un lado, el británico Tom Odell apostó por la sencillez acompañándose solo de las luces y su piano de cola para interpretar ‘Black Friday’ y ‘Another Love’, mientas tanto Vicco continuó deslumbrando con un arreglo y una coreografía especiales de su ya clásica ‘nochentera’ y Camilo dio una muestra de profesionalismo con un medley de éxitos que incluyó ‘Mismo Aire’, ‘Vida de rico’ y ‘Sí me dices que sí’ así como ‘Por primera vez’, su tema en colaboración con su esposa, Eva Luna Montaner.
Pero hay tres artistas que parecen haber salido especialmente airosos de la tarima del Wizink. Aunque no hay duda que ‘Maníaca’ de Abraham Mateo se parece tanto a la canción de la que toma su sample central, ‘Maniac’ de Michael Sembello es difícil discutir con la calidad de su presentación con mini orquesta, cuerpo de baile y referencias a ‘Flashdance’ incluida. Por su lado Aitana, ya una fija de esta ceremonia, repasó varias canciones y coreografías de su gira ‘Alpha’ ganándose al público al atreverse con sus movimientos más provocadores y criticados. Finalmente, David Bisbal no se complicó demasiado, pero su experiencia le permitió dominar la tarima como si hubiese estado en pleno fenómeno OT.
LA IMPOSIBILIDAD DE ESCAPAR DEL COTILLEO
Así como la ausencia de Shakira atrajo comentarios sobre su deuda con hacienda la interpretación de Álvaro de Luna del tema ‘Todo contigo’ estaba marcada por su pública separación de Laura Escanes, a quien escribió la canción. Lo mismo se hizo notar cuando el sencillo recibió un premio a canción del año por la misma canción, y aunque es una lástima que se hable siempre de su relación, se trata después de todo de uno de los mejores compositores pop en activo y valdría la pena revisar la canción más allá de su relación personal.
Pero en el caso de Aitana es evidente que cualquier comentario es buscado. La artista tomó la tarima de los 40 music awards como una declaración de principios al interpretar los temas y las coreografías que se han señalado por ser «hipersexuales» en algunos canales de televisión, incluyendo Telecinco. Su interpretación de ‘Los ángeles’, ‘Las babys’ y ‘Miamor’ parecía calculada para reavivar esas críticas, y para dejar claro que le importan bastante poco.
LA SIEMPRE COMPLICADA ELECCIÓN DE GANADORES
Aunque no hubo un momento tan emblemático como el de Rosalía y Pedro Almodóvar es complicado discutir con los premios a la trayectoria de Shakira, Ozuna y los británicos de Take That, que recordaron que al tomar un escenario hacen olvidar a Robbie Williams, los otros premios tienen algo de cuestionables, en particular los internacionales.
Es complicado justificar que Tom Odell tenga un mejor directo que Taylor Swift, Coldplay o Beyoncé, o que Loreen sea una artista internacional superior a la propia Swift o a figuras como Sam Smith, Olivia Rodrigo o Dua Lipa. Son momentos en los que parece imposible no asumir que se entrega el premio más importante al artista que se encuentra en la audiencia, lo que quita algo de brillo al premio.
LOS 40 MUSIC AWARDS AHORA COMPITEN CON LOS LATIN GRAMMY
Algo se puede decir de los 40 Music Awards de 2023: Fueron más entretenidos que las últimas ediciones de los Latin Grammy. Es una buena noticia dado que ahora comparten el país con la ceremonia de entrega de los míticos gramófonos, y aunque esta última seguramente tendrá siempre una ventaja importante en cuanto a su poder de convocatoria al menos seguir el modelo más pop de MTV los diferencia, aunque este año nadie haya puesto a perrear a Diaz Ayuso.