En cuanto a salud capilar se refiere, algunos casos de alopecia androgenética no pueden solucionarse mediante tratamientos médicos. Por eso, los hombres y mujeres que quieran devolver a su cabello una densidad natural pueden optar por un injerto capilar.
Este representa una solución permanente para la calvicie en zonas medianas y pequeñas. Para llevarlo a cabo, se extraen unidades foliculares de la zona donante y, posteriormente, se implantan en la parte afectada. En Madrid, la clínica MC360 es experta en realizar esta clase de procedimiento mediante la técnica FUE. Usando aparatología de última generación, el equipo de profesionales puede llevar a cabo esta operación mínimamente invasiva sin dejar cicatrices visibles.
Los pasos del injerto capilar
MC360 es una clínica especializada en tratamientos capilares. Sus conocimientos y aparatología permiten asesorar de forma personalizada a quienes buscan dar una nueva apariencia a su cabello. Para ello, ofrecen una primera consulta de diagnóstico gratuita y, cuando los expertos determinan que el paciente es apto para un injerto, estudian qué área es más adecuada para ser donante y cuántas unidades foliculares van a extraer.
El injerto capilar mediante la técnica FUE permite que la cirugía sea rápida, tanto en su ejecución como en su recuperación. Para llevarla a cabo, el primer paso dentro del quirófano es marcar el diseño que se va a seguir al implantar las unidades. Además, los pacientes reciben anestesia local, para evitar cualquier tipo de molestia.
La segunda fase en la extracción, teniendo mucho cuidado para no dañar la zona donante; las unidades se cuentan, limpian y seleccionan para conseguir el efecto deseado. En cuanto están listas, el cirujano utiliza un bisturí de zafiro para realizar pequeñas incisiones en el cuero cabelludo. En ellas se implantan luego las unidades foliculares, una a una.
Beneficios de la técnica FUE
La técnica FUE consiste en el uso de un instrumento perforador motorizado para extraer las unidades foliculares de una en una. De esta manera, se consigue un resultado muy natural y no quedan cicatrices visibles, gracias a que las incisiones necesarias para el injerto son mínimas.
Debido a la tecnología que se emplea en este método, todo este procedimiento no lleva más de 6 u 8 horas. Sumado a esto, después de una evaluación médica, el paciente puede recuperarse en la comodidad de su casa.
Para asegurarse de que todo haya quedado correcto, el personal médico de MC360 agenda hasta 4 revisiones tras la cirugía. Así, se implican de forma personalizada en cada caso, garantizando que se cumplan los deseos de cada paciente. Quienes decidan contratar su servicio de injerto capilar, empezarán a ver resultados notables a partir del quinto mes, siempre que se cumplan los cuidados posoperatorios correctamente.
Se puede solicitar más información a través de las vías de contacto disponibles en la página web de MC360.