R.A. Mohamed, un ‘tiktoker’ que según Fiscalía mantuvo «una intensa actividad» difundiendo propaganda de grupos terroristas y participó «en la denominada yihad mediática» ha reconocido este lunes los hechos en la Audiencia Nacional y ha aceptado una condena de un año y ocho meses de cárcel.
Fuentes jurídicas han confirmado que Mohamed ha mostrado su conformidad con el escrito del Ministerio Público, que señala que los hechos que se le imputaban eran constitutivos de un delito de enaltecimiento del terrorismo.
Con todo, las mismas fuentes han precisado que la solicitud de pena de un año y ocho meses de prisión será sustituida por su internamiento en un psiquiátrico penitenciario.
Cabe recordar que la Fiscalía solicitó esa sustitución dado que el acusado sufre esquizofrenia residual, en la que predominan «síntomas negativos como la efectividad embotada, la abulia, el aislamiento social y el trastorno de atención», concurriendo la circunstancia modificativa de la responsabilidad criminal «eximente incompleta de enfermedad mental».
El Ministerio Público señalaba que el acusado, a través de vídeos grabados en primera persona y hablando en español, «hacía patente su exponencial proceso de radicalización, con ideas subversivas hacia toda autoridad, política o militar, así como contra cualquier sistema democrático, manifestando su inequívoca intención de ejecutar todo tipo de actos violentos en nombre de la yihad e incitando a terceros a llevarlos a cabo».
En concreto, lo hacía a través de sus 10 perfiles en las redes sociales (6 en Facebook y 4 Tiktok), con 1522 seguidores, en los que compartía y publicaba videos –hasta un total de 364– que obtuvieron 121.104 visualizaciones. En ellos realizaba comentarios ensalzando y justificando las acciones llevadas a cabo por miembros de organizaciones terroristas de índole yihadista.
La Fiscalía incluía en el relato más de una decena de mensajes, como uno de marzo de este año en el que dice que se sorprende de la cantidad de seguidores que tiene y de su trascendencia a nivel internacional y manifiesta que quiere morir en el camino de Dios.
En otro, manifestaba ser «el sicario de Alláh» y afirmaba que «hay que empezar pronto a descuartizar y a aniquilar a todo el que trabaja en el sistema…».