El precio del aceite de oliva, el oro líquido de la dieta mediterránea, está experimentando una escalada preocupante. Desde el mes de marzo, este ingrediente esencial en la cocina de muchas familias ha aumentado su valor en un asombroso 75%. Para agravar aún más la situación, en el último mes, ha subido un 10%. Estas cifras inquietantes nos llevan a un sombrío pronóstico: en las próximas semanas, el aceite de oliva podría alcanzar los 10 euros por litro, un precio que no todos pueden permitirse.
7La perspectiva de los productores
Para comprender mejor esta crisis en el sector del aceite de oliva, es fundamental considerar la perspectiva de los productores. Luis Carlos Valero, gerente y portavoz de la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores de Jaén (Asaja), destaca la complejidad de la situación. Atribuye el encarecimiento del aceite de oliva a dos años consecutivos de sequías, que han afectado gravemente a las cosechas. Sin embargo, Valero advierte que este aumento de precios no es necesariamente beneficioso para los productores, ya que no compensa los crecientes costos de producción, como carburantes, fertilizantes, fitosanitarios y mano de obra.