En un inesperado giro de eventos, parece que la próxima temporada de ‘Gran Hermano VIP 8’ ha decidido desafiar los límites del Código Ético de Mediaset al sumar a sus filas a una figura sumamente controvertida. La noticia de que Laura Bozzo, la reconocida presentadora peruana rodeada de innumerables escándalos, podría convertirse en una de las concursantes estelares, ha generado un revuelo considerable.
Este movimiento audaz por parte del programa promete desencadenar discusiones acaloradas sobre los límites de la ética televisiva y el impacto que personalidades tan polémicas pueden tener en el entretenimiento.
5Mediaset se salta su propio código ético y el de los realitys
Con la inclusión de Laura Bozzo en el elenco, queda evidente que Mediaset nuevamente pasa por alto tanto su propio código ético como el de los reality shows. La figura de la presentadora peruana se encuentra vinculada a una serie de escándalos de corrupción y deudas, elementos que no concuerdan con la línea editorial que originalmente se buscaba mantener.
No obstante, es válido recordar que, en el pasado, en el programa ‘¡Vaya vacaciones!’, ya se había transgredido uno de los puntos establecidos en el código ético de los realitys al sumar a Carmen Nadales, quien previamente había sido expulsada de manera disciplinaria del programa ‘Secret Story’.