El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha hecho referencia a la polémica de los últimos días a cuenta del beso forzado que le presidente de la Real Federación Española de Fútbol dio a la jugadora Jenni Hermoso al conseguir la victoria en el Mundial, asegurando que si bien no se está prestando atención a la victoria por la polémica, se ha conseguido unir a la sociedad, que de forma «unánime» ahora tiene claro que «hay que cambiar actitudes» contra el machismo.
En una entrevista con la Cadena SER, ha recalcado que las jugadoras de la Selección «han superado «una batalla sorda» de muchas mujeres que han sufrido «comportamientos machistas».
Es, por tanto, «negativo» que se esté hablando de algo que «no debería requerir ni debate», como es la polémica de Luis Rubiales.
«Ha habido un intento de que esto basculara sobre si esto estaba bien o mal, pero es unánime, todo el mundo termina concluyendo que este comportamiento no tiene defensa posible», ha indicado.
Ahora que ya se ha padecido que en vez de hablar de un éxito deportivo se hable del comportamiento de Luis Rubiales, «lo que se ha conseguido es que haya más gente volcada con que hay que poner freno a actitudes machistas» que antes del mes de agosto.
«Hay una opinión tan contundente que este problema ha servido para poner de manifiesto que no sólo las leyes tienen que ser justas, sino que tiene que haber un cambio de actitudes», ha defendido.
Este país, ha opinado, «igual que se ha sometido al bochorno de ser noticia internacional por este problema, la sociedad no se ha partido en dos mitades» y hay una opinión «determinante que rechaza esa actitud y que tiene más claro que antes que hay que cambiar actitudes».
