El «Garbanzos con bacalao y espinacas» o «Potaje de Vigilia» por Karlos Arguiñano es una exquisita y tradicional receta de la cocina vasca que destaca por su sabor y texturas únicas. Este plato, conocido por ser una opción durante la Cuaresma y la Vigilia. Combina la suavidad de los garbanzos con la profundidad del bacalao y la frescura de las espinacas.
La maestría culinaria de Arguiñano se refleja en cada detalle de esta preparación, elevándola a un nivel superior en comparación con el cocido convencional. Un manjar que cautiva paladares y refleja la riqueza gastronómica de la región.
2¿Qué día se come potaje?
El disfrute del potaje es factible en cualquier temporada del año. No obstante, respetando las costumbres arraigadas, el potaje de vigilia adquiere su significado especial al ser degustado los viernes de Cuaresma y en el Viernes Santo. En línea con la norma católica de abstenerse de carne durante esos días, esta receta icónica se presenta como una opción completa y arraigada en la tradición.