En pleno apogeo del verano, España se encuentra sumergida en una implacable cuarta ola de calor que está llevando los termómetros a niveles asfixiantes en prácticamente todas las regiones del país. El calor abrasador se ha vuelto irrespirable en las calles, y las altas temperaturas están desencadenando un incremento preocupante en los casos de golpes de calor. El incesante aumento del mercurio se convierte en una preocupación no solo para la comodidad diaria, sino también para la salud pública. Aunque el futuro parezca incierto, la ola de calor tendrá un fin. A continuación te contaremos que dice la AEMET al respecto.
4Persistencia de la incertidumbre: cambios en el horizonte
A medida que avanzamos hacia el miércoles, la incertidumbre se cierne sobre la situación climática. Las altas temperaturas persistirán en el medio Ebro, los valles fluviales del cuadrante suroccidental y las depresiones del nordeste. Sin embargo, la posibilidad de lluvias y chubascos añade un elemento de imprevisibilidad a la ecuación. El desafío de predecir con precisión la trayectoria del clima se convierte en una tarea cada vez más compleja.