A veces hay que empezar un texto pudiéndole disculpas al lector, en este caso el problema es que Joss Stone, quizás la voz que ha definido lo que entendemos por “Soul” en el siglo XXI, dijo un par de veces ‘I Love You’ en acento británico en mi dirección general, por lo que es complicado que la crónica sea realmente objetiva. Pero tampoco hay demasiados motivos por los que preocuparse, la cantautora inglesa estaba en Madrid celebrando sus 20 años de carrera, algo complicado de lograr si no se tiene el talento para enamorar una audiencia.
La artista tomo la tarima de Noches del Botánico con la confianza de una artista experimentada, pero que por su juventud mantiene la energia. Dado que empezó a componer y grabar en su adolescencia llega a este punto de experiencia, donde puede manejar a la audiencia y a su talentosa banda a su gusto, pero que después de casi dos horas en tarima sigue dando la sensación de que podría seguir cantando otro par de horas.
Por este setlist de celebración saltan varios temas claves para los fanaticos de Joss Stone. Canciones como ‘Super Duper Love’, ‘Music’ o ‘Jet Lag’ saltarón entre alguna versión de canciones clave de la historia del soul, así como un repaso de canciones de ‘Water For Your Soul’, sui disco pensado para experimentar en los sonidos del hip hop y el reggae. Es una de esas artistas que contagia felicidad, algo bastante valioso en un país que está saliendo de unas elecciones especialmente controversiales.
Solo con eso se podría hablar bien del concierto de la británica, su capacidad de transmitir energía positiva y felicidad es suficiente para recomendar comprar una entrada para cualquier ciudad en la que vaya a aterrizar. Pero su relación con la audiencia, que pasa por saludar varios miembros directamente, tomar peticiones de canciones aunque no recuerda toda la letra y dejar que su bajista y su guitarrista improvisen sin su voz por varios minutos. Es complicado de explicar, pero es una artista que entiende su presentación en vivo como el hogar definitivo de un catálogo que de por sí es brillante.
No es casual que la audiencia coreara las canciones, báilala todo lo posible o directamente gritara una y otra vez agradeciendo a la artista por su cariño. Fue una comunión absoluta del público capitalino que se entrego por completo en agradecimiento a que la artista se entregaba de vuelta en cuerpo y alma.
JOSS STONE EMPIEZA LA DESPEDIDA DE NOCHES DEL BOTÁNICO ESTE AÑO
La inglesa además es un buen artista para un festival, o ciclo de conciertos, que empieza su despedida por este año. Es un espacio que se ha hecho clave en el mapa festivalero de la capital, y del pais, dado que su estructura le permite tener un cartel especialmente ecléctico, y atraer varios tipos de público, además de sumar artistas que sin el botánico quizas no tendrían una tarima apropiada en la capital.
Todavia quedan un par de artistas clave en los últimos días del verano, aunque aún quedan nombres como Placebo, Tomatito y Damien Rice por pasar por la tarima. Pero los que quedan tienen una barra alta que superar, pocas veces se encuentra un concierto donde el público salga tan contento como salió de la presentación de Stone, que demostró comodamente como ha conseguido mantener una fantaticada leal sin sumar demasiados éxitos reales en las listas.
LOS CONCIERTOS DE VERANO EMPIEZAN A DESPEDIRSE
Dado que el verano empieza a cerrar su temporada de conciertos, y que Stone ha sabido enamorar al público lo normal es celebrar al menos que los veranos de la capital siguen siendo uno de los mejores lugares para encontrarse con artista que no suelen pisar el país sin este tipo de eventos.