El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, ha acudido a la Cumbre de la OTAN que se está celebrando en Vilna, Lituania. Un encuentro entre los países aliados que, a pesar de estar nuevamente centrada en dar apoyo a Ucrania en su conflicto armado con Rusia, parece no haber salido tal y como el líder ucraniano podría haber pensado, «marcándose» Zelenski un evento al más puro estilo de Mariano Rajoy.
Un año después de la cumbre de la OTAN en Madrid, los líderes de la Alianza Atlántica se han dado cita durante esta semana en la capital lituana de Vilna. Un encuentro entre los estados miembros de la OTAN que ha tenido como objetivo, entre otros asuntos, la evaluación de la estrategia de la Alianza Atlántica, diseñada en Madrid, entorno al conflicto armado entre Ucrania y Rusia.
«La principal cuestión de la que está todo el mundo pendiente es qué dice la OTAN sobre su relación con Ucrania, qué tipo de paquete vamos a ver por lo que se refiere a rearmar a Ucrania y mantener el flujo de armamento que lelga de los aliados» destacaba, según ha publicado RTVE, el director de la Iniciativa de Seguridad Transatlántica, Christopher Skaluba.
Una Cumbre a la que ha asistido el propio presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, que poco antes de su aparición en Vilna, no dudaba en valorar a sus aliados europeos, a la vez que criticar la lentitud de la OTAN para tomar posiciones en firme sobre la introducción de Ucrania en la Alianza Atlántica. «Valoramos a nuestros aliados […] Ucrania está representada en la cumbre de la OTAN, pero también merecemos respeto. De camino a Vilna, recibimos señakes de que se está discutiendo cierta redacción de un texto sin nuestra participación […] esa redacción se refiere a la invitación para convertirse en miembro de la OTAN, no a la membresía, pero es absurdo y sin precedentes» ha destacado el presidente Zelenski.
ZELENSKI, UN INVITADO «SIN AMIGOS» EN LA CUMBRE
Compromiso de la OTAN con Ucrania, a pesar del aparente roce desesperado del presidente Zelenski que, sin embargo, parece estar más centrado en el entorno militar, que realmente en el acercamiento de lazos entre los principales dirigentes de la Alianza Atlántica con el presidente ucraniano. Algo que se podía comprobar en la cumbre, en la que Volodímir Zelenski, uno de los claros «invitados de honor» de la Cumbre, acababa marcándose un Mariano Rajoy.
En concreto, tal y como se puede observar en algunas fotografías del encuentro entre líderes de la OTAN, mientras muchos de ellos forman pequeños grupos de conversación y encuentro, Volodímir Zelenski se queda completamente apartado de las conversaciones, solo ante los miembros de la OTAN, en una posición que recuerda mucho a la vivida por Mariano Rajoy en alguna de sus participaciones internacionales mientras era presidente del Gobierno español.
Un paralelismo que parece mostrar que, a pesar del claro apoyo que ha prestado la Alianza Atlántica a Ucrania en su conflicto con Rusia en el último año, aún quedan pasos por recorrer para que el país liderado por Volodímir Zelenski consiga su ansiada entrada en la OTAN. Una entrada que podría hacer incrementar aún más la tensión europea con Rusia, debido al fuerte rechazo del Kremlin ante esta posibilidad.
Una cuestión que hace que el presidente ucraniano aún sea un mero «invitado» a la cumbre de la OTAN. Un invitado que, sin embargo, sigue contando con el apoyo armamentístico y militar de la Alianza Atlántica, el cual se ha visto reforzado en Vilna, donde hasta el actual presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ha comprometido reforzar la presencia militar española en Rumanía y Eslovaquia, países claves de la defensa de la OTAN en el conflicto armado entre Rusia y Ucrania.
