Uno de cada tres españoles ha reducido sus salidas a bares, restaurantes y hoteles debido a la inflación. A pesar de ello, el gasto en ocio no ha disminuido significativamente, ya que valoramos la importancia de socializar tras superar la pandemia. Sin embargo, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) continúa recibiendo quejas sobre abusos y malas prácticas en el sector de la hostelería, especialmente con la llegada del buen tiempo y las vacaciones. Es crucial abordar estos problemas para proteger los derechos de los consumidores y fomentar un trato justo y transparente en el ámbito gastronómico.
5Malas prácticas legales pero desconsideradas
Aparte de los abusos mencionados, existen también malas prácticas que, aunque legales, resultan desconsideradas con el consumidor:
- Rechazo de reservas para una sola persona: A menudo, los establecimientos prefieren recibir reservas para al menos dos personas, lo cual puede resultar inconveniente para aquellos que deseen disfrutar de una experiencia gastronómica en solitario.
- Cobro adicional por elementos básicos: Algunos locales cobran por separado el aperitivo, la leche del café o incluso el hielo, a pesar de que estos conceptos estén especificados en la carta.
- Negación de acceso a baños a no clientes: Es inapropiado y poco considerado impedir el acceso a los baños a personas que no son clientes, especialmente cuando se trata de niños pequeños o personas mayores que pueden tener dificultades para aguantar.