En los últimos años, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha implementado una serie de nuevos radares en las carreteras españolas con el objetivo de mejorar la seguridad vial y reducir la velocidad de los conductores en zonas de alto riesgo. Estos radares, algunos de ellos móviles y otros fijos, utilizan tecnología de última generación para detectar infracciones de velocidad y sancionar a los conductores que las cometan.
4La DGT quiere evitar que los conductores peguen el consabido frenazo
La técnica antifrenazo es una estrategia de conducción que busca evitar los peligros asociados al frenazo brusco en respuesta a la presencia de radares fijos en las carreteras. La colocación de radares fijos, que la DGT tiene la obligación de señalar, puede provocar que algunos conductores aceleren para superarlos y luego frenen bruscamente al darse cuenta de que han sido detectados, lo que representa un peligro para el resto de usuarios de la vía.
Para evitar este comportamiento, la técnica antifrenazo sugiere que los conductores mantengan una velocidad constante y respeten los límites de velocidad en todo momento, independientemente de la presencia de radares fijos. De esta manera, se evita la necesidad de frenar bruscamente y se reduce el riesgo de accidentes.
Además, es importante destacar que el frenazo brusco en cualquier circunstancia que no sea de emergencia o avería, puede ser sancionado bajo el amparo del artículo 53 del Reglamento de Circulación. Por lo tanto, seguir la técnica antifrenazo no solo es una medida de seguridad vial, sino también una forma de evitar multas y sanciones.