Asociada con el romanticismo, a la luna se le atribuyen connotaciones de amor, pasión, romanticismo y sensualidad. Desde la antigüedad, la Luna ha sido vista como una fuente de inspiración para poetas y escritores que han encontrado en ella una metáfora para describir un amor intenso y profundo.
Altera las mareas, se asocia a lo mágico y lo místico y en las noches más oscuras, aparece radiante, llena y hermosa para iluminar de una manera muy especial. Si te confiesas como un mortal más con tendencia a la selenofilia, descubre estas 7 curiosidades de nuestro satélite natural, quizás no las conozcas.
32- Las cicatrices, parte de lo que hacen especial al satélite natural de la tierra
La superficie de la Luna está cubierta de cráteres causados por impactos de rocas espaciales durante millones de años, y algunos de ellos son bastante grandes. Por ejemplo, el cráter Bailly tiene un diámetro de unos 300 kilómetros y es uno de los más grandes de la superficie lunar. Algunos de estos cráteres pueden considerarse «cicatrices» en su superficie, ya que son el resultado de eventos violentos que han cambiado permanentemente la forma del terreno lunar.
Además de los cráteres, también hay otros tipos de formaciones en la superficie lunar que podríamos considerar como «cicatrices», como los valles y cañones que se han formado debido a la actividad tectónica o la erosión. En general, la superficie de la Luna es un paisaje marcado por la historia de impactos y procesos geológicos que han dejado su huella en su superficie y han creado su aspecto único y fascinante. De allí que esto también sea inspiración para escritores y poetas.
“La luna sigue siendo hermosa con sus cráteres ¿Entonces por qué estás tan asustado de tus cicatrices?”
Zubair Ahsan