Naturgy tiene un claro compromiso con la protección de la biodiversidad, por lo que ha implementado numerosas e innovadoras soluciones tecnológicas en sus instalaciones renovables y de redes eléctricas, con el fin último de reducir el impacto de su actividad en la avifauna.
En este contexto, la compañía energética analiza durante la fase de diseño de sus nuevas instalaciones, la presencia de especies sensibles, adaptando la localización e implantación de las instalaciones y desarrollando medidas de evitación, y posteriormente realiza un seguimiento ambiental durante la fase de operación para poner en marcha, en caso necesario, medidas adicionales.
Una de estas iniciativas consiste en el radiomarcaje de aves potencialmente afectadas, -como el águila real, sisón, alcaraván, elanio, aguilucho cenizo o buitre-, mediante el control a estos ejemplares con emisores GPS, que permite conocer su distribución y pautas de vuelo en un sistema de información geográfica (GIS). Unos resultados que se utilizan desde Naturgy para mejorar el diseño de las instalaciones y las medidas a implementar para reducir los posibles impactos durante la operación.
Además, la compañía ha desarrollado una aplicación para realizar paradas en tiempo real de aerogeneradores ante situaciones de riesgo de colisión de aves. Así pues, determinados parques tienen instalados dispositivos automáticos de detección, los cuales emiten sonidos para ahuyentar a las aves y, en caso necesario, provocar una parada automática los aerogeneradores.
También se trabaja con soluciones basadas en la naturaleza, desarrollando acciones integrales para la gestión de las carroñas de explotaciones ganaderas o cotos de caza que se encuentran en las proximidades de los parques eólicos, evitando así la presencia de reclamos para aves carroñeras y desplazando sus zonas de alimentación a lugares alejados y exentos de riesgo.
La innovación en las líneas eléctricas como protección de la avifauna
Así pues, son varias las propuestas que impulsa Naturgy en el ámbito de la innovación tecnológica, en su objetivo de encontrar soluciones para la biodiversidad en todos los ámbitos de su actividad, incluidas las redes eléctricas, promoviendo el desarrollo de nuevas herramientas y técnicas que permitan una explotación de la red más segura, eficiente y sostenible.
En el marco de este compromiso, la distribuidora de electricidad del grupo, UFD, con el apoyo de Ibérica de Aparellajes, ha ideado el seccionador de vano, un elemento de maniobra y protección de las líneas aéreas, de accionamiento manual a través de una pértiga, que es capaz de abrir un circuito con tensión y corrientes despreciables sin carga. Un dispositivo que simplifica los puentes en las zonas de posado de aves, reduciendo el riesgo de electrocución.
Su despliegue se ha iniciado en Cuenca y en Socuéllamos (Ciudad Real). En el mismo sentido, la compañía llevó a cabo el año pasado un proyecto para instalar crucetas aislantes en la Serranía de Cuenca que elimina el riesgo de electrocución de las aves al estar fabricadas con materiales aislantes.
Adicionalmente, y a partir de las inspecciones de líneas eléctricas a través de drones, UFD ha implementado un sistema para el procesamiento de las imágenes mediante inteligencia artificial para, entre otras cosas, detectar posibles nidos o aves, a los que proteger de las actividades eléctricas.
Conservación y recuperación de especies en peligro de extinción
Naturgy está comprometida con la conservación de la biodiversidad, el capital natural y el patrimonio cultural en los entornos de sus instalaciones, con especial atención a los espacios y especies protegidas.
Como parte de las iniciativas de conservación de la avifauna, la compañía energética está realizando actuaciones para la reintroducción de diversas especies en peligro de extinción en los parques naturales protegidos del Alto Tajo y Serranía de Cuenca. Por ejemplo, en coordinación con la Junta de Castilla La-Mancha, el Parque Natural del Alto Tajo y Rewildig Europe, el grupo cuenta con el proyecto de reintroducción del buitre negro, con el objetivo de que la especie vuelva a estar presente en este territorio, en el que coexiste la actividad de generación de energía con las especies autóctonas, como el buitre leonado.
Del mismo modo, Naturgy realiza también actuaciones de mejora del hábitat del urogallo, otra especie en peligro de extinción, en las zonas próximas a parques ubicados en León, como por ejemplo la construcción de un Centro de Cría en Cautividad para el urogallo en Castilla y León o la construcción de la Casa del Parque del Espacio Natural Lago de Sanabria y alrededores situado en Zamora, en el parque natural protegido Lago de Sanabria. Medidas están consensuadas con la Delegación Territorial de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León y se realizan dentro de un convenio de colaboración entre la Fundación Patrimonio Natural de Castilla y León y Naturgy.
En colaboración con GREFA, la compañía ha realizado una acción en los parques eólicos del nudo de Fuentelsaz para la recuperación del cernícalo primilla, especie protegida que debido a las transformaciones sufridas en el campo en las últimas décadas ha visto mermado su hábitat, resintiéndose significativamente su población. En colaboración con la Delegación Provincial en Guadalajara de la Consejería de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, se ha construido en la localidad de Tortuera un primillar, un edificio acondicionado con cajas nido para alojar a 40 pollos criados en cautividad por GREFA.
El proyecto más reciente en el ámbito de la avifauna en el que la compañía va a colaborar, junto con el Ayuntamiento de Tabernas (Almería), es el de la promoción y protección de la ganga ortega y otras aves esteparias de la zona, con el objetivo de reforzar las actuales poblaciones de estas aves en áreas de la provincia de Almería.
Transformadores convertidos en refugios de la biodiversidad
Además, Naturgy ha realizado el mantenimiento de transformadores de biodiversidad; edificios de transformadores eléctricos en desuso que se restauran para aprovecharlos para generar biodiversidad, potenciando la nidificación y refugio de diversas especies silvestres amenazadas, como aves, murciélagos o insectos.
Estos transformadores han sido utilizados como laboratorios de investigación, por parte del Museo Nacional de Ciencias Naturales del CSIC, y como puntos de reintroducción de especies amenazadas, por parte de GREFA, mediante un enfoque innovador de economía circular.
Unas actividades con las que, además, también la empresa busca acercar a los más jóvenes. En concreto, y en junto a GREFA, realiza sesiones de sensibilización y formación ambiental para colegios, en las que se expone a los escolares el funcionamiento del hospital de fauna, el proyecto de cría en cautividad y los animales irrecuperables del centro. Además, los estudiantes tienen la oportunidad de conocer los diferentes tipos de aves que acogen en sus instalaciones. Durante el pasado año, 1.344 escolares participaron en estas sesiones formativas, en una colaboración entre empresas y centros escolares para fomentar el cuidado de las aves, a la vez que se procura el desarrollo energético del país.