La ensaladilla rusa, un clásico de la gastronomía, es un plato que muchos disfrutan en ocasiones especiales. Sin embargo, ¿qué hace que una ensaladilla rusa sea digna de un campeonato? Existe un ingrediente secreto que marca la diferencia y eleva su sabor a otro nivel.
En esta ocasión, te desvelaremos el misterio y te mostraremos cómo incorporar ese toque especial a tu receta. Prepárate para sorprender a tus invitados con una ensaladilla rusa única y deliciosa.
2Paso 1: Pon en una olla aceite y agrega los coloraíllos
Comienza por la preparación del aceite de los coloraíllos. Empieza pelando los coloraíllos (o las gambas pequeñas), reservando los cuerpos para usar más adelante. En una olla a fuego medio, coloca todas las cabezas y un poco de aceite de oliva, dorándolas. Luego, añade el aceite de girasol y reduce el fuego al mínimo. Deja que se cocine durante 4-6 horas sin que llegue a hervir.
Una vez pasado este tiempo, retíralo del fuego y déjalo reposar durante al menos 12 horas, manteniéndolo en frío una vez que se haya atemperado. Cuando haya transcurrido el tiempo de reposo, cuela la mezcla, presionando ligeramente las cabezas para obtener todo el jugo.