Los tratamientos de blanqueamientos dentales son uno de los más frecuentes y exitosos, sobre todo tras la pandemia. Durante estos años hemos sido más conscientes que nunca de las carencias de nuestra sonrisa y, sobre todo, de su color amarillo o sus posibles manchas que afean su aspecto.
Por todo ello, muchos deciden remediarlo acudiendo a su odontólogo para que subsane este problema. No obstante, también nosotros tenemos que poner de nuestra parte para que los resultados sean los esperados. Uno de esos primeros cuidados que debemos seguir en el hogar tiene que ver con la dieta, pues no podemos comer todos los alimentos que se nos antojen. Recuerda que muchos de ellos los tendremos prohibidos o muy restringidos. Vamos a verlos.
La explicación es sencilla, pues durante el tratamiento de blanqueamiento dental el esmalte está más poroso y es más propenso a que se manche. Poco a poco tus dientes volverán a hidratarse y dejarán de ser tan permeables. Mientras tanto, te recomendamos que destierres de tu dieta los siguientes alimentos:
- Vino tinto.
- Té.
- Café
- Frutos rojos como las cerezas, los arándanos, las fresas o las frambuesas.
- Bebidas de cola o gaseosas.
- Cítricos y alimentos ácidos,
- Zumos, helados y sorbetes
- Salsas industriales como el kétchup, la mostaza o la de soja.
- Especias y colorantes alimentarios como el pimentón, el azafrán y el curry.
- Chocolate negro.
Sin duda, todos estos alimentos conviene evitarlos tras un proceso de blanqueamiento y durante unas cuantas semanas por precaución. Afortunadamente, al igual que conviene rehuir de determinados alimentos, otros nos echan una mano durante este periodo de tiempo en el que nuestros dientes son más proclives a mancharse.
Te recomendamos que tomes nota de los que reseñamos a continuación:
- Los garbanzos.
- Las verduras y ensaladas, con la excepción de las alcachofas y las espinacas que sí que ensucian el esmalte.
- El brócoli, ya que fomenta la salivación y atenúa las manchas en los dientes.
- Frutas como el plátano, la manzana y la pera.
- Si somos devotos del vino, podremos tomarlo siempre que se trate de vino blanco, el tinto tiende a manchar los dientes debido a la presencia de sus taninos.
Pero hay muchos más consejos que podemos seguir para minimizar el riesgo de que la dentadura se tiña durante este periodo en el que permanece más vulnerable debido a su porosidad. De esta manera, según nos explica Emilio J. Ruiz, coordinador del Área de Prostodoncia y Estética de Donte Group, es recomendable una adecuada ingesta de agua durante las comidas para impedir que los alimentos lleguen a manchar los dientes al depositarse sobre ellos.
Tampoco los baños en piscinas con cloro parecen una buena idea, ya que esta sustancia daña el esmalte. En cualquier caso, recuerda que la higiene bucal sigue siendo un pilar imprescindible. Al menos has de cepillarte tres veces al día después de las principales comidas.