¿Existe algo más refrescante y delicioso en un día caluroso de verano que un buen plato de salmorejo cordobés? Esta deliciosa crema fría es la joya de la gastronomía andaluza, una deliciosa mezcla de tomates frescos, pan de telera, aceite de oliva virgen extra y sal, que se puede mejorar aún más con un diente de ajo. Su textura suave y cremosa es el resultado de una preparación meticulosa, que puede llevarse a cabo con paciencia, en un mortero o con la ayuda de una batidora o un robot de cocina.
El salmorejo cordobés es un primo cercano del famoso gazpacho, aunque con un toque más denso y espeso, y es la opción perfecta para aquellos que buscan un plato que no solo satisfaga su apetito, sino que también refresque y alivie el calor en los días más calurosos del verano. Si quieres aprender a preparar esta deliciosa receta, ¡Sigue leyendo!
8Deja reposar el salmorejo antes de servir
Después de preparar el salmorejo, es recomendable dejarlo reposar en el refrigerador durante al menos una hora antes de servirlo. De esta forma, los sabores se asentarán y la consistencia se volverá más firme. Además, servirlo frío en un día caluroso será un auténtico placer para el paladar.