Cerca de 200 militares participaban estos días en el Operativo de Rescate de Personal no Combatiente, en el que se evacuaba a un centenar de civiles de la zona de conflicto en Sudán. Una misión que aplaudía, al regreso de los militares, gran parte del Gobierno de España, así como la propia titular de Defensa, Margarita Robles. Un reconocimiento que, sin embargo, no va acompañado de una adecuada remuneración para estos «héroes sin capa», tal y como han lamentado asociaciones de militares.
Ante el incremento de tensión bélica entre militares y paramilitares en Sudán, muchos han sido los países que han tomado la decisión de evacuar a sus conciudadanos presentes en el país, ante el claro riesgo que se vive en el país. Una decisión que también tomaba España a través del Ministerio de Defensa, que movilizaba a cerca de 200 militares para evacuar a los civiles que se encontraran en la zona de conflicto.
Una misión que se llevaba a cabo con éxito, evacuándose a cerca de un centenar de civiles, 34 de ellos españoles, de Sudán, gracias al esfuerzo conjunto del Ministerio de Defensa y el Ministerio de Exteriores y, concretamente, de los militares que viajaban en misión internacional de alto riesgo para «rescatar» a estos conciudadanos en peligro, realizándose la evacuación a apenas 16 kilómetros de la capital de Sudán.
Esfuerzo y desempeño ante el que la ministra de Defensa, Margarita Robles, no tardaba en agradecer a los militares su ejemplar actuación: «No tengo más que palabras de reconocimiento y de agradecimiento. Una vez más, como pasó en Kabul, (los militares) han dejado a España en un lugar muy importante. Han estado a la altura de las circunstancias» ha destacado la titular de Defensa.
UNA «PALMADITA EN LA ESPALDA» POR LA EVACUACIÓN DE SUDÁN
Agradecimiento de Margarita Robles hacia los militares que han arriesgado sus vidas en la evacuación de Sudán que, sin embargo, parecen no ir acompañadas de una «recompensa» para estos «héroes sin capa». Y es que, tal y como lamentan asociaciones de militares a este diario, lo cierto es que estos profesionales de las Fuerzas Armadas siguen siendo los «peor pagados con diferencia de toda la Administración Pública».
«El único que mata o muere cumpliendo con su trabajo, se prepara también para recibir exclusivamente buenas palabras, halagos y halagos falaces, que no sustentan ni una retribución justa ni unas condiciones de trabajo adecuadas» destacan estas fuentes militares. Unas fuentes que, asimismo, señalan que los militares que han formado parte de esta misión especial en Sudán, al igual que sucedió con Afganistán, no recibirán «recompensa alguna» por su esfuerzo y sacrificio en una operación realizada «sin preaviso».
«Siempre al pie del cañón, pero nunca para ser tratado con respeto por quienes le envían a la incierta aventura» lamentan fuentes militares. Una realidad que parece aún más sangrante tras el aumento de presupuesto anual que contemplan los Presupuestos Generales del Estado para el ministerio de Defensa en 2023. Unos presupuestos que, tal y como señalan estas mismas fuentes, contemplan un gasto de 4.700 millones de euros para planes de armamento, pero no para incrementar los 300 millones que suponen los salarios de los militares.
Falta de gasto del Ministerio de Defensa en remuneración a su personal de las Fuerzas Armadas, especialmente a aquellos que participan en misiones internacionales de gran calado, que parece seguir creando una clara brecha entre los militares y la titular del ministerio de Defensa. Una brecha que crece a pesar del presupuesto militar otorgado por el Gobierno, y que sigue dejando a los profesionales de las Fuerzas Armadas en el último puesto de salarios públicos, pero en las primeras posiciones de responsabilidad y sacrificio a nivel nacional e internacional.