Una curiosa forma de llevarnos un pedacito de naturaleza a casa es mediante las biosferas cerradas, también conocidas como jardines embotellados o ecosistemas de Latimer.
Una biosfera cerrada es un ecosistema completo, que se vierte en el interior de un recipiente transparente. Su nombre de “Ecosistema de Latimer” se debe a su creador, el ingeniero británico David Latimer, quien en 1960, se preguntó cuánto podría sobrevivir una planta, con su porción de suelo, en un entorno hermético y aislado del exterior, donde solo penetrara la luz del sol. Tomó una gran botella de 40 litros de capacidad, colocó en el fondo piedras y tierra y añadió una cobertura de musgo. Sembró en su interior varias plantas, las regó y cerró. Desde entonces, la botella solo ha sido abierta una vez y lleva aislada desde entonces.