La crema de calabazas es un plato muy versátil que puede ser adaptado según los gustos y preferencias de cada persona. Puedes utilizar diferentes tipos de calabaza para hacer esta sopa, como por ejemplo la calabaza de invierno, la calabaza butternut o la calabaza kabocha. Cada una de ellas tiene un sabor y textura ligeramente diferente, así que puedes experimentar para encontrar tu favorita. Además de las cebollas y el ajo, puedes agregar otros vegetales como zanahoria, apio o pimiento rojo para agregar más sabor y nutrientes a la sopa. A continuación, te hablaremos del secreto de Karlos Arguiñano para que te quede suave y rica.
5Preparación de la receta
Precalienta el horno a 200°C. Coloca los trozos de calabaza en una bandeja para horno, rocíalos con aceite de oliva y sazona con sal y pimienta. Hornea durante unos 30 minutos o hasta que la calabaza esté tierna y dorada. Mientras tanto, en una cazuela grande, calienta un poco de aceite de oliva y añade la cebolla y el ajo. Sofríe a fuego medio durante unos 5 minutos hasta que la cebolla esté tierna y dorada.