Los molinos de viento son unas construcciones más representativas de nuestro país. Cada vez son más los turistas que viene a España buscando admirar la estampa de estos gigantes que Cervantes convirtió en leyenda y crean estampas únicas en el paisaje. Aunque la idea de crear mecanismos movidos por la fuerza del viento es muy antigua, el molino de viento como tal surgió en el siglo VII, en la región del actual Irán. El invento llegó a Europa y se popularizó en zonas donde el viento es constante, como en Holanda, donde los vientos atlánticos soplan fuerte.
4MOTA DEL CUERVO, EN CUENCA

Mota del cuervo es otra localidad de Castilla La Mancha que merece la pena visitar. Es un enclave con mucha historia, numerosas construcciones religiosas antiguas, casonas señoriales, plazas con mucho encanto y 7 imponentes molinos que han resistido al tiempo, que antaño formaron parte de un gran conjunto de 23. Esta localidad recibe el nombre de Balcón de la Mancha, porque se encuentra ubicada en una loma coronada por la silueta de los molinos.