El bizcocho es uno de los dulces más básicos de la repostería que se prepara con tres ingredientes principales que son harina, azúcar y huevos. La elaboración es muy sencilla, aunque podemos ir aumentando el nivel de complejidad y sofisticación a medida que dominamos la receta base. Pero es cierto que, a pesar de su sencillez, no siempre queda como quisiéramos: no sube y se queda crudo por dentro, se rompe por la superficie, se quema o no queda lo suficientemente esponjoso.
9¿POR QUÉ SE DESINFLA AL SACARLO DEL HORNO?
Otra situación que acaba con nuestra ilusión de comernos un bizcocho perfecto ocurre cuando creemos que está perfectamente cocinado, dorado por fuera y emitiendo un aroma delicioso en toda la cocina, y al sacarlo del horno vemos como se desinfla. Es lo que pasa cuando no estaba todavía cocinado del todo. Por eso nunca se debe abrir la puerta antes de los 20 minutos de cocción. Transcurrido ese tiempo, podemos comprobar si ya está cocinado pinchando una brocheta. Si sale limpia, ya estaría hecho y podemos sacarlo sin miedo.
