El bizcocho es uno de los dulces más básicos de la repostería que se prepara con tres ingredientes principales que son harina, azúcar y huevos. La elaboración es muy sencilla, aunque podemos ir aumentando el nivel de complejidad y sofisticación a medida que dominamos la receta base. Pero es cierto que, a pesar de su sencillez, no siempre queda como quisiéramos: no sube y se queda crudo por dentro, se rompe por la superficie, se quema o no queda lo suficientemente esponjoso.
5HORNEADO PARA UN BIZCOCHO PERFECTO
El momento del horneado es uno de los más delicados, aunque como vemos todo el proceso es importante. El primer error habitual es no precalentar el horno antes de meter el bizcocho dentro. Lo aconsejable es precalentarlo unos 15 minutos antes, para que al introducirlo tenga ya la temperatura adecuada. Por lo general, un bizcocho de tamaño estándar como los que hacemos en casa, necesita un horneado en el centro del horno, durante unos 30 minutos a 180 °C. Pero como sabemos, cada horno tiene sus particularidades, así que tampoco hay una fórmula universal. Cada persona tiene que encontrar el punto.
