Muchas de las familias han cambiado sus rutinas cafeteras de las mañanas. Si antes nos levantábamos y preparábamos el agua y el café, ahora simplemente le damos a un botón y esperamos a que la cafetera haga su trabajo. Un sólo gesto que sin embargo ha cambiado muchas cosas más, puesto que esas cápsulas de café con las que desayunamos, suponen un deshecho nuevo en nuestros hogares que también tenemos que gestionar.
En este sentido, las propias marcas de cafeteras y de cafés desarrollan sistemas de recogida para reciclar las cápsulas de café y reducir su impacto. Pero por si todavía no lo tienes muy claro, te damos unas cuantas ideas de los usos de dichas cápsulas una vez hayan servido para su propósito principal, que es hacer café.
8Moldes para helados
Una de las funciones más originales que hemos visto para las cápsulas es la de molde para helados.
Tan sólo debemos vaciar las cápsulas de café y dejarlas muy limpias. Después las podemos rellenar con el «sabor» que prefiramos: fresa, coca cola, zumo de naranja… Lo que se nos ocurra.
Si invertimos en un palito de helado bonito, lo cierto es que nos puede quedar un postre muy original para una cena con amigos. Además, al ser tan pequeños, estos helados son perfectos para tomarse uno, saciar las ganas de azúcar pero sin abusar.