Siempre envidiamos a las familias millonarias como la que forman Pilar Rubio y Sergio Ramos, pero también nos acordamos, tanto o más, de los hijos y de lo afortunados que son. Tienen la vida resuelta no solo ellos sino casi seguro sus hijos y sus nietos. Pero no siempre es así, al menos de cara a la galería o durante la niñez, adolescencia y juventud. Tienen que ganarse esa fortuna futura y mientras, estudiar y trabajar tanto o más, para que valoren lo que cuesta ganar las cosas. Es lo que pretende Pilar Rubio.
3INTENTAN QUE CREZCAN EN LA NORMALIDAD
Es complicado viendo la casa donde viven y lo que ven de sus padres, las fiestas, cómo visten, lo que ganan y tiene, pero Pilar Rubio asegura que «son niños que van al colegio, aunque no juegan mucho al fútbol”, expresando un día a día normal. De hecho, puso un ejemplo de expresa muy bien la educación que les dan: “Mi hijo viene a veces y me dice: ‘Es que quiero un móvil, yo quiero uno porque no sé quién tiene uno’”. Casi seguro que la mayoría de sus compañeros tiene uno, pero él no.
