Las polémicas parecen seguir rodeando a los principales actores del Gobierno de España. Y es que, a pocos meses de las elecciones generales, algunos de los ministros del Gobierno de coalición parecen seguir estando «en boca de todos» por su gestión de sus respectivos departamentos. Pero, especialmente, por su falta de responsabilidad ante estas situaciones que han sembrado las críticas contra el Ejecutivo nacional. Es el caso de las ministras Pilar Llop e Irene Montero que, a pesar de haber sido el centro de las críticas en las últimas semanas dentro de sus respectivos ministerios, no parecen estar dispuestas a dar un paso al frente asumiendo sus responsabilidades, al igual que sí lo han hecho otros responsables dentro del Ejecutivo nacional.
La conocida Ley del ‘sólo sí es sí’ diseñada por el equipo de Irene Montero sigue creando polémica tanto dentro como fuera del Gobierno de España. Y es que los aparentes fallos de la normativa de Igualdad no sólo son evidentes tras las más de 500 rebajas de condenas que se han producido desde su aprobación, sino también por las constantes críticas que se producen tanto dentro de la política como dentro del Poder Judicial. Críticas que también han repetido los enviados europeos que, tras escuchar las explicaciones de diversos líderes políticos, no han dudado en exigir medidas inmediatas de reforma para la Ley.
Unas reformas que no parecen llegar, siendo la ministra podemita la primera en defender la Ley del «sólo sí es sí» y su redacción inicial, a pesar de que las críticas y las condenas favorecidas no dejan de acumularse contra la ministra podemita. Una situación que, sin embargo, no sólo no ha conseguido un cambio de parecer en Irene Montero, sino que tampoco se ha traducido en ningún acto de responsabilidad dentro del Ministerio de Igualdad, donde no se ha producido ninguna dimisión, a pesar del profundo malestar que ha provocado la normativa.
Situación que también se repite en el caso del Ministerio de Justicia de Pilar Llop, fuertemente señalada en las últimas semanas. Y es que la ministra de Justicia se ha convertido en el centro de la polémica judicial, debido al evidente enfado de los letrados ante el incumplimiento de la ministra a su compromiso de subir los salarios del sector. Una polémica que también señala a Pilar Llop ante la reforma de la ley del ‘sólo sí es sí’, habiendo señalado la ministra considerarse «responsable» de esta reforma. Modificaciones que no llegan, y que tampoco hacen que nadie del equipo de la titular de Justicia haya renunciado a su cargo.
RENUNCIAS QUE SÍ LLEGAN EN TRANSPORTES
Falta de «responsabilidades» asumidas desde algunos ministerios del Gobierno de coalición en la que destacan los departamentos de Irene Montero y Pilar Llop, entre otros. Una situación que también parece salpicar a ministerios como el de Interior, gestionado por Fernando Grande-Marlaska, que evita entonar el «mea culpa» ante situaciones como la crisis de Melilla, a pesar de las múltiples crisis que pesan sobre su titularidad en el ministerio.
Responsabilidades que, sin embargo, sí se han asumido desde el departamento de Transportes de Raquel Sánchez. Y es que, después de la situación que provocaba la contratación de los nuevos trenes de ancho métrico para Cantabria y Asturias, inadecuados para las vías existentes, algunos de los principales responsables de esta contratación decidían dar un paso al frente y abandonar sus cargos, asumiendo como propia la responsabilidad ante este fallo, que costará miles de millones de euros.
Así pues, el presidente de Renfe, Isaías Táboas, y la secretaria de Estado de Transportes, la luguesa Isabel Pardo de Vera, han presentado su dimisión a la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, quien las aceptaba ante la situación polémica. Un acto de responsabilidad que, sin embargo, no se ha visto repetido en el resto de ministerios del Ejecutivo, a pesar de las muchas polémicas que los rodean a pocos meses de las elecciones generales.
