A pesar de la rebaja en el IVA implementada por el Gobierno de Pedro Sánchez a principios de año en el ya famoso paquete de medidas anticrisis, la variación en el precio de los alimentos no parece cumplir con las expectativas de muchos.
De acuerdo a la información que se maneja por el Gobierno, hasta el momento el acuerdo con las empresas y supermercados se cumple, estamos hablando de una pauta de aumentos de 3,2 % mensual hasta finales de junio para cerca de cincuenta productos de distintos rubros.
Para el Gobierno la inflación general es básicamente un promedio donde impactan sectores como el de servicios y productos frescos y artículos que se comercializan fuera de las grandes cadenas y que no están dentro del acuerdo, de allí el incremento que hemos vivido durante el mes de enero.
Sin embargo, estas cifras para el Gobierno y algunos analistas son esperanzadoras, para los próximos meses e incluso para el año 2023.
La realidad. Inflación en alza Vs IVA reducido
De acuerdo a las últimas estadísticas publicadas por el INE, la inflación cerró el mes de enero en 5,9 %, al parecer muy por encima de lo planificado y la que los especialistas llaman la inflación subyacente que es la que no está asociada a alimentos frescos ni energía cerro en 7,5 %, lo que se une a los resultados del primer mes de rebaja del IVA, nos presentan un escenario para nada alentador para millones de familias que semanalmente deben hacer la compra.
Y es que según los especialistas, la medida de reducción del IVA impuesta por el Ejecutivo no parece estar surtiendo los efectos deseados, ciertamente se ha visto una reducción de precios en artículos de primera necesidad o prioritarios que son los principales afectados por la medida, pero en el resto de los productos no incluidos en esta lista, como la carne, el café, el pescado, los alimentos para bebe, los precios parecen haberse duplicado en cuestión de días.
De hecho el grupo de alimentos y bebidas que más gastos representan para los españoles, según los datos del INE se ha disparado durante el mes de enero en un 15,4 % con relación al año pasado.
Lo cierto es que según los expertos, el incremento de la inflación durante el mes de enero se generó por el aumento en los componentes del índice de inflación subyacente, sectores donde se están originando las mayores presiones inflacionarias.
De acuerdo a las cifras suministradas por el INE, alimentos como el aceite de oliva, la leche, los quesos, el pan, las harinas, las pastas y las legumbres registraron una bajada de precios durante el mes de enero, sin embargo el vestido y el calzado registraron un incremento con respecto al año pasado.
Los servicios en general experimentaron un incremento, el turismo y la telefonía representaron los incrementos más importantes, la energía y la electricidad registraron caídas importantes de casi un 17,5 %, los combustibles por su parte se encarecieron en un 10.5 %.
Y con relación a los productos incluidos en el listado de rebaja del IVA, experimentaron una caída de precios de 0,4 %, específicamente alimentos como huevos y patatas.
La postura del Gobierno
Pero desde el Gobierno el panorama sigue siendo prometedor, el Ministerio de Asuntos Económicos ha hecho hincapié en que la tasa interanual del IPC solo se ha incrementado en dos décimas durante el mes de enero y a pesar incluso de la subida de los precios del combustible y la “triste” retirada de la bonificación de los 20 céntimos por parte del Gobierno.
De hecho el Ministerio de Asuntos Económicos ha ratificado su postura de que espera que la llamada inflación subyacente inicie un descenso en los próximos meses, así como los costes energéticos.
Para el viceministro de Política Económica, Gabriel Rubinstein, señaló que dentro del IPC de precios regulados, el sector de los productores estacionales sufrió un incremento de 7,1 %, el sector de los productos y servicios estacionales un incremento de 7,9 % y el denominado IPC núcleo un incremento de 5,4 % y esto se produjo básicamente a tres factores;
- Incremento de frutas y verduras debido al factor estacional y efectos climáticos
- Incremento en rubros de servicios regulados como las tarifas de gas, agua, tabaco, telefonía e internet y medicina.
- Incremento en los precios del sector servicios turísticos
Señaló además el viceministro “seguimos trabajando para hacer frente a este aspecto. Los acuerdos de precios firmados registran un elevado grado de cumplimiento, por lo que confiamos que la extensión de los mismos a muchos más rubros y productos nos permitan ir reduciendo márgenes y los mencionados factores inerciales”.
“Seguimos trabajando desde la macroeconomía y microeconomía, para que en los meses venideros se registren bajas significativas en las tasas de inflación, y esperemos que, hacia fines de año, las tasas mensuales se acerquen al 3 %, y la tasa de inflación en el año pueda rondar el 60 % presupuestado”, estas fueron las palabras finales de Rubinstein.