¿Estás cansado del frío invernal? No te preocupes, esta receta de garbanzos con chorizo te ayudará a combatirlo con una explosión de sabor reconfortante que te llenará de energía. Prepara tus mejores cucharas, porque estamos a punto de sumergirnos en un auténtico cuchareo a tope.
Sigue leyendo para descubrir los secretos de esta deliciosa cazuela, y sorprende a tus seres queridos con un plato exquisito y nutritivo. ¡Comencemos!
3Antes de cocinar el potaje: Preparación de los garbanzos
Elegir los garbanzos es importante. Puedes encontrarlos secos o ya cocidos, y en varios tamaños. Recomendamos los garbanzos castellanos grandes, esféricos y de color amarillento. Es mejor usar garbanzos secos para controlar el punto de sal del guiso y evitar los tratamientos de los enlatados.
El día anterior, pon los garbanzos en agua con bicarbonato o sal durante 12 horas. Lávalos después para quitar impurezas y asegúrate de que no haya garbanzos estropeados. Escurrir y apartar hasta el momento de preparar el guiso.
Si usas garbanzos ya cocidos, lávalos bien para quitar la gelatina que los rodea. Agrégales al final de la cocción del guiso para que se impregnen del sabor. Son útiles para ahorrar tiempo en la cocina, pero es mejor usarlos en otros platos como hummus o ensaladas.