En todo estudiante se da un punto de inflexión vital: el paso de entrada al mercado laboral.
Y este paso supone el inicio de una ruta que lo cambia todo.
Empezamos a experimentar el mundo del trabajo tal y como es.
Rompemos con supuestos y expectativas, con lo que nos habían contado del empleo. Esta vez es nuestro turno y empezamos a conectar con una realidad que nos sumergirá en un mar de aprendizajes.
Becas, máster, prácticas, son programas que difieren en formato, propósito y momento de ejecución. A veces pueden llegar a entremezclarse.
Entonces, ¿qué son las prácticas profesionales?
Se trata de un contrato formativo para la obtención de la práctica profesional que corresponde al nivel de estudios del trabajador.
Es evidente que cómo poner las prácticas en el CV puede dotar de puntos jugosos al curriculum vitae de la persona.
Esta modalidad de contrato puede extenderse desde los seis meses hasta el año. Para poder acceder a ella, los destinatarios deben poseer alguna de las siguientes titulaciones:
- Universitario.
- Formación profesional de grado medio o superior,
- Máster profesional.
- Certificado de profesionalidad que habilite para el ejercicio de la profesión.
La vida laboral media de los españoles se sitúa en 35 años. Seis meses o un año, en cualquier caso, las prácticas perduran un período breve que transcurre como un suspiro.
¿Cómo sacar el máximo partido de las Prácticas Profesionales?
El comienzo de un programa formativo de prácticas representa el punto de salida de nuestra ruta profesional. Tiene lugar una ruptura en la barrera de entrada que tendrá un impacto beneficioso en cualquier curriculum.
Te regalamos 7 consejos sobre cómo aprovechar esta valiosa etapa:
- Vivirlo con Actitud Positiva
El acceso a las prácticas representa nuestro pase de entrada al trabajo. Por ello, vivir estos meses con consciencia es clave para que lo enfoquemos desde la gratitud y una actitud positiva.
Deberíamos desapegarnos de las exigencias impuestas y no esperar que el trabajo sea perfecto. En lugar de ello, si lo contemplamos como una etapa de aprendizaje y provecho, nuestras competencias se desarrollarán de forma exponencial.
- Desarrollo de Competencias adquiridas
Una vez finalizados los estudios, nuestra mente hierve cargada de conocimientos e intelectualizaciones que necesitan ser aplicadas. Unas prácticas constituyen ese puente que nos permite pasar del conocimiento a la habilidad. Se trata de un máster-laboratorio que es remunerado y nos permite estrenarnos sin demasiado riesgo.
Como son nuestras primeras andanzas, deberíamos dejar el miedo en la trastienda y aprovechar el “comodín” del nuevo para preguntar, tener iniciativa y sugerir. Si nos equivocamos no pasa nada. La confianza se desarrolla a través de la prueba-error, atreviéndonos a contribuir con nuestra acción.
- Networking: el arte de crear Contactos
Nadie olvida a sus primeros compañeros de trabajo.
El Networking consiste en la creación de una red de contactos que te ayuden a conocer oportunidades de trabajo. Incluso, algunos pueden ayudarte a conseguir directamente un puesto, a través de su recomendación fehaciente a recursos humanos.
De hecho, un 77% de los buscadores activos en España, usan este canal junto con otros, según el Instituto Nacional de Estadística.
Si eres tímido, existen algunas estrategias sencillas que puedes adoptar: desde tomártelo como un juego o hacer que la gente vaya a ti.
- Aprendizaje a través del Mentoring o Tutorización
“Si caminas solo irás más rápido; si caminas acompañado llegarás más lejos”, como indica un famoso Proverbio chino.
La modalidad del contrato en prácticas, a diferencia de otros, presenta como requisito la existencia de la figura del tutor. Este rol realiza la labor de tutorizar a la persona nueva, acompañarla durante todo el proceso y seguir su desempeño en concordancia a su plan formativo (previamente definido por la empresa).
Este requerimiento se puede concebir como una oportunidad de oro para el empleado. ¿Quién no desea tener una mano guía cuando está empezando?
- Dar el Salto Internacional
Independizarse, madurar, aprender idiomas, viajar. Las ventajas de embarcarse en la aventura de realizar prácticas profesionales en el extranjero son múltiples. Además, este primer paso puede llegar a convertirse en el mejor vehículo previo al establecimiento en otro país.
Lo que a muchos aspirantes les trae dolores de cabeza es la búsqueda. ¿Cómo poder acceder a esta oportunidad?
Actualmente, no hay barreras a la información y Google puede proporcionarnos muchas pistas sobre ofertas de prácticas en distintos países.
Más específicamente, dentro del perímetro de la Unión Europea y fuera del mismo, existen portales de empleo como la Red EURES y AIESEC que contribuyen a esta búsqueda.
¿Quién dijo miedo?
- Autoconocimiento y Plan de Desarrollo Profesional
Para saber hacia dónde dirigirnos, tenemos que conocer de dónde partimos. El contar con la experiencia de las prácticas contribuye de forma sustancial a nuestro conocimiento. Nos puede otorgar claridad acerca de en qué somos buenos, es decir, nuestras fortalezas. Del mismo modo, nos ayuda a identificar nuestras debilidades o aspectos de mejora para encaminarnos hacia aquello que queremos conseguir.
Incluso nos puede ayudar a la toma de decisiones: bien confirmando la idoneidad de nuestra elección formativa o impulsándonos a elegir otros caminos profesionales.
- Cierre de ciclo: Comunicación y Actualización de CV
¿Han finalizado tus prácticas?
Ahora es momento de que el mundo se haga eco de ello. Para este, aprovecha las ventajas de redes como Linkedin. Este canal se ha posicionado como una de las herramientas más poderosas para conseguir empleo y te será de gran utilidad durante toda tu trayectoria profesional.
Y no te olvides de lo más importante. Si no continúas en la empresa donde has realizado tus prácticas, no importa. La vida laboral es larga y está repleta de nuevas andaduras.
Por eso, agradece y despídete de forma ejemplar. No se sabe lo que pueda deparar el futuro.
Pule tu curriculum y saca brillo a las lecciones aprendidas.
¿Cuál va a ser tu próxima aventura?
