Francia lleva dos jornadas de huelga consecutivas por las nuevas propuestas de Macron: la primera el jueves 19 y la segunda el sábado 21. La primera estuvo protagonizada por los sindicatos que paralizaron el país con las protestas y el segundo con los jóvenes de izquierda que se manifestaron en las calles de París. El Consejo de Ministros de Francia se está preparando para adoptar un nuevo sistema de pensiones con dos medidas que están generando un gran descontento en la población.
La adopción de estas nuevas medidas son los pasos previos a la aprobación final ya que aún tiene que ser debatida y votada por la Asamblea francesa. La situación es complicada para Macron ya que no tiene mayoría absoluta, aunque parece que tiene a su favor los votos de los conservadores para continuar.
Macron considera que el actual sistema de pensiones es insuficiente
El presidente de Francia ha acentuado que el país está por debajo de la media de la Unión Europea en la edad mínima de jubilación y que el sistema que existe en la actualidad no es suficiente como para frenar la degradación demográfica. Macron hace referencia a que cada vez hay mayor número de pensionistas y menos trabajadores activos.
Por lo tanto, se plantea una situación crítica para los franceses que tienen un régimen de jubilación deficitario y sin perspectiva de mejora a medio plazo, según indica el propio Macron. No obstante, este argumento resulta estéril para los sindicatos, los partidos de izquierda y la ultraderecha. Parecen estar de acuerdo en que esta no puede ser la solución y para demostrarlo han salido a manifestarse a las calles.
Dos ministros que se encuentran implicados en esta situación han querido expresar su opinión a la prensa. Se trata de Olivier Dussopt, ministro de trabajo y Gabriel Attal, ministro de Hacienda. Han informado de que estas nuevas medidas formar parte de una reforma redistributiva y es por eso que no podrás ser inferiores a los 1.200 euros brutos cada vez que corresponde con un 85% del salario mínimo actual.
Para el ministro Attal, la apertura que está realizando el Gobierno es enriquecedora ya que han entregado diferentes aportaciones mientras que el líder de la izquierda, Jean-Luc Mélechon aboga por una jubilación a los 60 años. Según Attal, este tipo de estrategia solo haría que los jóvenes tengan que pagar más impuestos lo que supone casi una condena social.
Macron quiere aumentar de 62 a 64 años la edad mínima de jubilación
El presidente de Francia ha informado de que se aumentará de 62 a 64 años la edad mínima de jubilación de cara al año 2030. Es una propuesta del Ejecutivo que tiene el deseo de adelantar al año 2027 teniendo en cuenta que la cotización pasaría de ser de 42 años a 43. Todo esto sería de cara a tener una jubilación completa.
Sin embargo, la población francesa no está de acuerdo ya que los sondeos muestran que la gran mayoría se opone. Estamos hablando de dos tercios de la población, aunque son conscientes de que la situación con respecto a las pensiones tiene que cambiar.
Otro de los puntos que reformará Macron es el de los regímenes especiales de jubilación que son ventajosos para el sistema general y que suelen ser utilizados por parte de empresas del sector público. Esto ocurre con la eléctrica estatal EDF y, además, se tendrán en consideración algunas profesiones que tienen mucho desgaste físico y mental.
Esto quiere decir que las personas que hayan empezado a trabajar antes de los 20 años podrán llegar a la jubilación con una pensión integral a los 62 años y, en el caso de comenzar a trabajar a los 18, podrán optar con una jubilación integral a los 60 e incluso a los 58 años. Sin embargo, hay que tener en cuenta que las personas que suelen comenzar a trabajar a esa edad son relativamente pocas y usualmente con condiciones de trabajo nefastas.
Macron quiere apaliar esa idea del trabajo precario joven y está intentando promover el conocido como empleo «senior» que obliga a las empresas de más de mil empleados a tener un cierto porcentaje de personas en fin de carrera (a partir de los 55 años).
Macron admite que falta mucho para apaliar la contaminación en Francia
Emmanuel Macron no ha querido ir con medias tintas y ha indicado que a Francia todavía le queda mucho para atajar la contaminación. Es cierto que el país ha logrado avances notables en la reducción de las emisiones de carbonos, pero que no llegarán a los objetivos impuestos por la Unión Europea para el año 2030.
La emisiones de CO2 están bajando, pero no lo suficiente, según el presidente de Francia. Para poder llegar a los estándares de la UE tendría que realizar el doble de esfuerzos y eso conlleva en sí mismo mucho trabajo. Todo esto se ha podido escuchar en su cuenta de Twitter donde ha publicado un vídeo explicativo sobre los progresos ecológicos de Francia.