Aunque por lo general se cree que son lo mismo, la intolerancia a la lactosa y la alergia a la leche, son completamente distintas, pues, los procesos por lo que ocurren ambas condiciones son completamente diferentes. Es importante identificar estas diferencias a tiempo porque incluso el tratamiento médico es completamente distinto. Por esta razón, continúa en este artículo para que aprendas sus diferencias y qué debes hacer en cada caso.
4Tratamiento para la intolerancia a la leche
Las personas que padecen intolerancia a la lactosa pueden restaurar la capacidad de su cuerpo de producir la enzima encargada de sintetizar la lactosa; sin embargo, este proceso puede durar meses, para ello debes consumir pocas cantidades, pero padecerás de los síntomas hasta que tu cuerpo pueda ir procesando la lactosa.
Para evitar las molestias puedes evitar las comidas con lácteos. Además, añade enzimas de lactosa en los alimentos con lácteos para que te ayuden a digerir estos alimentos y consume alimentos sin lactosa.