Ricky Rubio es uno de los «magos» del baloncesto español. Muestra de ello, es que todavía sigue en la palestra de la NBA. El jugador de 32 años de edad no se detiene, y aún cuando ha tenido que enfrentar muchas dificultades en los últimos tiempos, no baja la guardia. El base de los Cleveland Cavaliers ha regresado, y viene con ánimos de ampliar sus registros personales.
5En el banquillo no le exigían mucho
El banquillo de J.B. Bickerstaff no le estaban exigiendo mucho que digamos a Ricky Rubio. Sin embargo, el español salió a la cancha a «matar», y por eso fue que lo vimos sin miedo durante el juego.
Llevó el balón con cierta soltura, pudo protagonizar algunas entradas, e incluso hizo mover a la defensa rival.
Como dato, en su estreno tuvo dos tiros de forma consecutiva, cuando estaba en el tercer cuarto. Así, pudo irse al descanso porque no apareció en el último tramo del partido, aunque ya había cumplido con sus deberes.
