El yogur es uno de los alimentos de origen lácteo más sanos que existen. De hecho, se pueden preparar deliciosas recetas de lo más variopinto con este producto tan saludable, casi todos ellos postres, como el bizcocho de yogur de chocolate (que está delicioso, ¡deberías probarlo!) o las famosas magdalenas de yogur, de las más ricas que existen.
Todo esto está muy bien pero seguro que te has preguntado más de una vez qué pasa exactamente si, al abrir tu nevera, descubres que el yogur que estabas pensando en tomarte de postre o de merienda se encuentra caducado. ¿Debes tirarlo inmediatamente a la basura o puedes consumirlo sin temor a contraer alguna enfermedad relacionada con el aparato digestivo?
Precisamente para aclarar esta duda sobre el clásico asunto “yogur caducado” hemos elaborado este reportaje, en el que te explicamos si está justificado o no el temor a consumir estos productos fuera de fecha.
6Las propiedades del yogur
Debes saber que, a pesar de que el consumo de un yogur más allá de la fecha que marca la etiqueta no es en ningún caso (y como te hemos explicado) motivo de evitar su consumo, sí que es posible que en este plazo haya perdido parte de sus propiedades.
De esta forma, sus efectos probióticos podrían haberse visto alterados o empequeñecidos, así como otras de sus principales virtudes como su carga de calcio y demás propiedades nutricionales tan características del yogur.