Los misterios del océano: 10 cosas que no sabías sobre el mar

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Hoy vamos de los misterios del océano. Los océanos cubren más del 70% de la superficie terrestre y su importancia es vital para la supervivencia de la biota del planeta que habitamos como especie. Hoy, más que nunca, necesitamos recordar por qué la Tierra es llamada el «Planeta Azul».

Los océanos regulan el clima de la Tierra, absorben grandes cantidades de dióxido de carbono de la atmósfera, proporcionan gran parte del oxígeno que respiramos y los alimentos que comemos. Han sufrido los estragos de la contaminación durante décadas, se han convertido en un sumidero de desechos, han soportado la degradación de los ecosistemas marinos y son objeto de una sobrepesca indiscriminada.

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¿Por qué los microplásticos de los océanos preocupan tanto?

Se estima que alrededor de 8 millones de toneladas de desechos plásticos ingresan al océano cada año, lo que los convierte en la forma más común de desechos en el océano. Se estima que entre el 15% y el 30% de todos los plásticos son fragmentos de menos de 5 mm, comúnmente denominados «microplásticos».

Que no podamos verlo no significa que no esté allí, ya que los científicos han demostrado la presencia de microplásticos en muchas especies acuáticas, algunas de las cuales provienen de nuestra dieta diaria, e incluso han realizado estudios que han detectado microplásticos en nuestra orina, así que es algo que afectará a los misterios del océano.

Como consumidores de productos del mar, es difícil saber si los microplásticos nos afectan directamente, pero sabemos con certeza que están en todas partes: en el agua que bebemos, los alimentos que comemos y la ropa que usamos. El estudio de UIC concluyó que dos tercios de los microplásticos provienen de las lavadoras y del desgaste de los neumáticos cada vez que un automóvil frena.

Pero eso no es todo, los plásticos contienen aditivos como pigmentos, estabilizantes, hidrofugantes, retardantes de llama, endurecedores (como el bisfenol A) y plastificantes (como los ftalatos) que se lixivian al medio ambiente. Se sabe que algunas de estas sustancias son disruptores endocrinos que afectan nuestros sistemas hormonales.