Con la llegada del Año Nuevo, muchas personas se fijan nuevos propósitos, objetivos, metas y desafíos. Una iniciativa tan saludable como, por desgracia, infructuosa en muchos casos.
Los propósitos de cada Año Nuevo suelen ser más o menos fijos y generales, y suelen pasar por comenzar a hacer deporte, tratar de llevar una vida más saludable, tratar de comprar una casa, cocinar comida más sana…Como ves, suelen ser metas bastante habituales que, en pocos casos, logran llevarse a cabo.
¿Y cuáles son los principales motivos de que no se cumplan los objetivos marcados con el advenimiento del Año Nuevo? ¿Qué consejos puedes seguir para que consigas cumplirlos? Te dejamos un listado con los más importantes.
1Objetivos realistas para el Año Nuevo
Una de las premisas más importantes que debes plantearte de cara a los objetivos que quieres alcanzar con la entrada del Año Nuevo es que tienen que ser realistas. Es decir, es muy poco probable que si nunca haces ejercicio, te propongas convertirte en un atleta semiprofesional de la noche a la mañana. O si tienes problemas para comer sano, que transformes tu dieta en la más sana del mundo con pescados y mariscos de calidad.
Por lo tanto, tienes que ser consciente de que todo cambio necesita un proceso y una aclimatación. Los milagros rara vez se producen y si te fijas metas casi inalcanzables, lo más probable es que desistas demasiado pronto de perseguirlas y, como resultado, puedas incluso entrar en fase de frustración o hasta depresión. Ten esto muy en cuenta porque es muy importante.