¿Prefieres utilizar mantequilla para preparar dulces o para cocinar? Las razones para elegir una opción u otra pueden ser nutricionales, culinarias o simplemente la conveniencia al momento de untar.
Aunque ambas opciones pueden parecer similares a simple vista. Como su origen, procesamiento y composición son diferentes, lo que las hace tener propiedades y efectos distintos en términos de salud.
1Mantequilla
¿Sabías que la mantequilla es un alimento milenario? Se cree que su elaboración comenzó en el área de Mesopotamia hace más de 9000 años. Se obtiene mediante el batido y amasado de la nata de la leche, creando una emulsión de agua y grasa.
Además de ser deliciosa, la mantequilla es una fuente natural de calcio, magnesio y fósforo, así como de vitaminas A, E y D. Aunque debes consumirla con moderación, la mantequilla es un ingrediente versátil y valioso en la cocina.
