Dicen que la realidad casi siempre supera a la ficción. Y en este caso, nos encontramos ante una situación que ejemplifica a la perfección esta situación. Se trata de la noticia que ha sido publicada recientemente en varios medios de comunicación en torno a la adjudicación de los visados en España y la empresa que se va a encargar de ello.
El Español se ha hecho eco recientemente de una situación un tanto particular. El Ministerio puede tener que indemnizar con cuatro millones de euros a la empresa que denunció el anterior contrato de adjudicación de visados. Y ahora, de nuevo, puede ser esta misma empresa la que vuelva a ser la adjudicataria. A continuación te contamos todo lo que tienes que conocer al respecto.
Una historia que comienza en 2016
El Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación adjudicó el contrato de gestión de las solicitudes de visado a la empresa BLS International, como bien menciona el diario El Confidencial. El pliego contaba con un presupuesto estimado de 175 millones. Y, una vez adjudicado, el rival en la adjudicación VFS Global, perdía el negocio de los visados. Pese a ser la empresa que durante el ejercicio anterior se había hecho cargo de estos trámites.Hasta este punto, todo parece que cumple la legalidad de la que dependen los visados y este tipo de trámites. Sin embargo, todo cobra un mayor valor si tenemos en cuenta que hace apenas cinco meses una sentencia de Justicia declaraba la nulidad de la anterior adjudicación del contrato anterior de Exteriores a favor de BLS. La razón ordena “la retroacción de las actuaciones de la licitación al momento de la valoración de las ofertas, a fin de proceder a nueva adjudicación del contrato”. Sin duda, un escenario que es necesario contemplar para conocer el alcance con el que cuenta esta medida.
Una sentencia que todavía no es firme
No han sido pocas las empresas que se han visto damnificadas por esta situación y que no han tardado en levantar la mano para conocer las razones exactas que se han producido en todo este proceso. Consultados en Exteriores, y tal y como recoge El Confidencial, esta situación se ha podido producir porque la sentencia no es firma y todavía cabe un recurso de casación ante el Tribunal Supremo. Por tanto, “todavía está pendiente de formalización de la adjudicación del contrato a la empresa que ha obtenido la máxima puntuación”. No obstante, por las circunstancias particulares del contrato en cuestión, todo parece indicar que el contrato podrá ser adjudicado en breve y se haga público durante los próximos días.La resolución judicial sobre el contrato con BLS de 2016, que se publicó el pasado 13 de julio, confirma que la adjudicación no se ajustó a la normativa española ni a lo exigido en los pliegos de la propia licitación.
Diversas irregularidades
Encontramos diversas irregularidades que han terminado por marcar este proceso con una gran determinación. Entre ellas, se acredita que la compañía no logró demostrar el importe mínimo de solvencia económica requerida para poder participar y ser adjudicataria de la licitación. En este caso, se tenía que demostrar un volumen de cinco millones de euros en los tres ejercicios anteriores. Algo que no ha ocurrido, según la sentencia de la Audiencia Nacional.
Además de ello, que ya de por sí es grave, también es importante valorar que la empresa tampoco cuenta con oficinas para poder recibir a los solicitantes de visado en los países en los que iba a operar. Sin embargo, sí que era necesario disponer de ellas donde España tenía consulados. Algo que finalmente no ha ocurrido. Las direcciones que se presentaron en la demostración, según recoge El Confidencial, eran de pisos de alquiler para otros usos o, en muchos casos, ni siquiera existían.
Un conjunto de escenarios que convierten al proceso celebrado este año en un contexto repleto de dudas. Puesto que las dos empresas mencionadas en el presente artículo han vuelto a competir y, de nuevo, ha sido la empresa BLS la que ha vuelto a resultar vencedora. Queda por ver cuál será el resultado final de toda esta situación. Sin embargo, todo parece indicar que nos encontramos ante una nueva irregularidad de la que solo queda esperar su confirmación.