Hace ya muchos años, concretamente desde finales de 2009, que los canales y las emisoras de Radio Televisión Española (RTVE) dejaron de emitir anuncios. Esto marcó una nueva etapa para el ente público, pero también para los españoles, ya que sin anunciantes, hay que buscar financiación en otros lugares. ¿Quién paga nuestra televisión desde entonces? La financiación procede de dos vías. Por un lado, el Gobierno asigna una cuantía en los Presupuestos Generales del Estado (PGE), es decir, un dinero que proviene de los impuestos de los españoles. La otra fuente de dinero son los ingresos que deben destinar las compañías de telecomunicaciones privadas como Mediaset y Atresmedia.
5LA TELEVISIÓN A LA CARTA YA SE PRONOSTICABA HACE 40 AÑOS
Ya en 1985, José María Calviño, quien era el director de TVE por aquel entonces, explicó en una entrevista que la televisión a la carta era una utopía, pero que llegaría el momento en el que cada ciudadano programaría a su antojo. Y no le faltaba razón. Por eso, la televisión pública ha ido adaptándose progresivamente, teniendo siempre presente lo que iba a llegar. Hoy día ofrece canales que se complementan con la oferta de las plataformas bajo demanda. La televisión clásica tiene algo de lo que carecen las nuevas plataformas, y es ese acontecimiento social del consumo colectivo de un contenido. De hecho, las plataformas streaming se sirven de las cadenas para lanzar muchos de sus formatos.